Gracias Mushuk Away 2018 por este precioso tiempo compartido. Gracias a todas y todos por la siembra de tantos pensamientos, sentimientos y sensaciones bellas. Gracias por la vulnerabilidad y transparencia en los intercambios de palabras. Por la entrega y la humildad con la que se dieron en este espacio y se dan a sus proyectos, familias y comunidades. Gracias por hacer evidente que este gran sueño de «otro mundo» se construye desde abajo y con corazones como los suyos desprendidos del anhelo de poder, fama, dinero y relevancia.
Gracias por la sentida «ronda de abrazos de despedida» que penetró hasta lo profundo del alma sembrando en el interior la realidad maravillosa de sentirnos acompañados, de sentirnos en familia. Gracias a la escuela «La Nueva Esperanza» que nos movió e inspiró con la determinación de las familias del Puerto Cabuyal por ofrecer la mejor educación a sus hijos; una que les compromete con sus vidas, su presencia y su tiempo. Muchas gracias al equipo organizador y servidor de esta preciosa propuesta educativa por inspirarnos con la pasión, entrega y trabajo reflejado en cada rincón y en cada niño y niña.